Estudiante latino de San Marcos supera obstáculos para lograr el éxito
Por Melanie Slone
Reprobar una materia en MIT, no saber cómo conseguir asistencia financiera y ser un graduado universitario de primera generación…Richard Gabriel Huizar no se detuvo ante nada.
Hoy, Richard trabaja como ingeniero mecánico de prototipos en el equipo que diseñó el Apple Vision Pro. Como un latino que creció en San Marcos, se siente orgulloso de haber superado los obstáculos que tantos estudiantes enfrentan en su camino hacia el éxito.

Rebasar barreras
Las finanzas representaban el obstáculo principal, Richard contó a North County Informador. Aunque pensaba estudiar matemáticas en San Diego State, se dio cuenta de que no contaba con los fondos. Dijo que sus padres estaban en ese grupo que ganaba demasiado como para que él recibiera ayuda financiera, pero no ganaban lo suficiente para ayudarlo a pagar la universidad.
“No sabía nada de solicitar grants. No sabía pedir becas y esas cosas”, nos dijo. Así que San Diego State ya no era opción.
Dijo que no estaba seguro qué iba a hacer, pero “sabía que debía tener estudios”.
Recibió un buen consejo de su prima, Lisa Montes, quien una vez fue directora de relaciones escolares y difusión en comunidades diversas en MiraCosta College. Richard hizo una gira en 2012, “y simplemente me enamoré del plantel. MiraCosta en Oceanside es realmente hermoso. El personal es excepcionalmente amable”, dijo.
Decidió inscribirse y tuvo unos empleos en el plantel mientras estudiaba, para así sumergirse al 100 % en su educación. Uno de sus trabajos fue como alumno embajador, por lo que iba a las high schools en el Norte del Condado para explicar a los jóvenes que el community college era una opción.
“Mi obstáculo principal sin duda fue financiero”, nos dijo, “seguido muy de cerca por el hecho de no tener información, no tener un mentor, no contar con los recursos ni el conocimiento para saber cómo prepararme para la universidad”.
Como embajador, él ayudaba a estudiantes en las high schools a superar las barreras al contarles sobre las opciones para ir a la universidad y el proceso de becas.
“Estaba aprendiendo sobre estos diferentes procesos de solicitud que no conocía cuando yo iba a la high school”, dijo.
Al trabajar con otros, también se preparó para su propia transferencia. “Al convertirme en tutor en el centro de matemáticas en el plantel, aprendí rápido sobre las oportunidades que tiene un community college”, nos dijo.
“Lo que me reconfortaba era la asesoría que tenía en MiraCosta. Dijeron, ‘Vamos a asegurarnos de que tengas un plan, de que tomes las materias adecuadas. Te ayudaremos a buscar las becas, pero tú tienes que trabajar duro en la escuela’”.
Richard recordó horas innumerables sin dormir. Dijo que manejaba con sus amigos a San Diego State a estudiar los fines de semana ya que la biblioteca de MiraCosta no abría los domingos.
De MIT a Apple: Nunca rendirse

Richard fue el primer estudiante de MiraCosta College en transferir a MIT.
MiraCosta y Palomar College tienen programas que garantizan la transferencia a las universidades UC y las estatales, pero él decidió considerar además las escuelas privadas por sus fondos grandes de dotación y para becas.
Después de dos años, recibió su grado de asociado y pudo transferirse.
MIT lo atraía porque era “no solo el uso teórico sino también el práctico de todo lo que uno aprende”, dijo. Notó que, en esa universidad, tuvo acceso a recursos que no habría tenido en ningún otro lado.
MIT ofrece la oportunidad de cambiar de carrera en cualquier momento. Él estudiaba matemáticas, pero un amigo lo alentó a probar la ingeniería, así que se inscribió en una clase de Introducción a la Ingeniería Mecánica.
“El primer examen, lo reprobé por completo”, nos dijo. “Y de ahí se agravó todo, cada vez peor…el segundo examen, también lo reprobé. Así que me di de baja de ese curso”.
Pero sabía entonces lo que quería hacer en su vida, aplicar la matemática a una función práctica. En vez de darse por vencido, platicó con el profesor que impartía la materia que había reprobado y le pidió ser su asesor. “Cuando llevé la materia de nuevo el siguiente semestre, pasé fácil. Desde el primer día, estaba listo…mucho más serio”, recordó.
Una vicepresidenta de Apple era profesora en MIT y Richard consiguió una pasantía con la empresa su tercer año. “Hice una pasantía con dispositivos de entrada, entonces trabajé en funciones de cosas como el mouse, Trackpad, Pencil…”
Como pasante, se dio cuenta de que quería trabajar en algo creativo, algo relacionado con investigación y desarrollo. “Amo la parte creativa. Amo pensar en cómo podemos usar la tecnología de formas nuevas y cómo podemos hacer más con ella y ofrecer más funciones a la gente”, dijo.
Después de esta pasantía, se graduó en 2018. Pero entrar de planta a Apple no fue fácil. Pasó unos meses sin empleo, con su familia, y volvió a enfocarse.
Se fue a vivir al Área de la Bahía de San Francisco sin trabajo y se concentró en leer todos los días, hacer ejercicio y escribir en su diario, para construir su plan de vida. Después de probar una posición con otra empresa, en noviembre de 2018, recibió una llamada de su equipo de pasantía en Apple, quienes le ofrecieron un puesto en investigación y desarrollo.
“Trabajamos en el cruce entre la tecnología y la experiencia del usuario”, explicó. “Mi equipo desarrolló un primer prototipo del iPhone sin botón de inicio…El Lápiz de Apple tiene una cosita de contacto. Es algo que nuestro equipo hizo. Y trabajamos de lleno en la identificación facial”.
El último logro de su equipo es el Apple Vision Pro, “todo, desde el rastreador ocular que hace el Vision Pro hasta otros componentes, otros algoritmos que tiene, y hacer que estos funcionen”, nos contó. También ha trabajado un poco en iPhones, iPads y muchos otros productos de Apple.

Primero la familia
Independientemente de su éxito en la escuela y con Apple, Richard siempre coloca a su familia en primera fila.
“Mi familia era la roca de mi apoyo”, nos dijo. “Siempre estaban ahí para apoyarme, para decir sí se puede, alentarme, hacer lo que pudieran para ayudar, dejarme vivir en casa ya sea sin pagar renta o pagar una cantidad mínima, darme tiempo a veces para pensar las cosas… Ese amor y esa compasión dice tanto. Es uno de los cimientos que me ayudó a sobrellevar todo”.
Aun con el apoyo de la familia, Richard reconoció que puede ser difícil, sobre todo para los latinos.
“En realidad no tenía a nadie en mi familia a quien admirar en lo educativo”, nos dijo. “Siempre ha existido esa desconexión porque ellos no lo habían vivido. Sí, me apoyan, me aman, pero no entienden todo lo que esto implica”.
Sus padres le inculcaron la necesidad de tener una educación formal, nos dijo, pero no sabían cómo conseguirla.
“No me daba cuenta de lo importante del grado de asociado y el simplemente tomar ese primer paso”, agregó. Él era el primer miembro de su familia que participó en una ceremonia de graduación, la cual fue en MiraCosta College. Entonces, dijo, “cinco o seis de mis primos…volvieron a la escuela a hacer su licenciatura y regresaron a ese sistema por el cual yo pasé. Y me llevan unos seis, siete años”. Dijo que su impulso fue su guía. “Ver a mi familia regresar a la escuela gracias al trabajo que yo hice fue una gran victoria para mí”, dijo.
Subrayó que la familia sigue estando en primer lugar. Durante la pandemia, su abuelo se enfermó, así que Richard pidió a los de Apple en San José que lo dejaran trabajar desde San Diego durante las políticas de distanciamiento social para que él pudiera pasar tiempo con su abuelo.
“En 2020, hasta me cambié a San Diego, de manera no oficial trabajaba desde San Diego, iba y venía, y pasaba tres días a la semana después del trabajo con mi abuelo durante Covid”, dijo. “Durante unos seis a ocho meses, pude estar en casa y pasar ese tiempo con mi familia”.
En julio de 2021, se le mandó de manera oficial a San Diego, y ahora Richard está cerca de su familia. “Fue muy diferente a los días de universidad, donde es 100 % trabajo, o lo primeros dos años como empleado, a ahora darse cuenta al 100 % de que la familia es mucho más importante”, dijo.
Consejos para estudiantes y familias
Richard nos compartió lo que los jóvenes y los padres de familia pueden hacer para prepararse para la universidad y una carrera como la suya. Su consejo principal es, empiecen desde temprano. “Es tener esa mentalidad desde el comienzo”, dijo. “Empezar desde la primaria a prepararse para la universidad”.
Está pensando en la próxima generación en su propia familia. “Algo que pregunto a mis primos pequeños, tengan seis o tengan 10 años, les pregunto, ¿a qué universidad van a ir?”, dijo. “No les hago esta pregunta en la high school. Les hago esta pregunta en la primaria, para que desarrollen la mentalidad de, de veras van a ir”.
Richard cree que es importante saber qué materias hay que tomar en high school antes de inscribirse.
También recomendó pedir ayuda. “Creo que hay muchas cosas que me perdí porque pensaba que iba bien”, explicó. Sugirió preguntar qué clases tomar para llegar a la universidad.
“Todo mundo está para ayudarte, pero no te van a dar todo su interés hasta que preguntes”, dijo. “Entonces, si los buscas, ellos van a conectarte con quienes mejor te puedan ayudar. Y luego, una vez que te hayas conectado con esa persona o esas dos personas clave, eso lo cambia todo”, dijo.
“Tienes a alguien de tu lado que te va a enseñar el camino un paso a la vez y alentarte a apuntar más alto de lo que creías posible”.
Además del apoyo de la familia, él cree que la asesoría fue clave en su éxito. “Creo que fue una gran diferencia para mí entre lo que viví en la high school y lo que viví en el community college”, finalizó.
Para leer sobre el Apple Vision Pro en el que Richard trabajó: https://www.apple.com/apple-vision-pro/